
![]() |
Entre dos aguas |
Desesperación total , los cangrejos ni los tocaban, lanzaba los aparejos, esperaba diez minutos, recogía...y ahí estaban los cangrejos, ensartados en el anzuelo, mirándome con cara de circunstancia y moviendo las patitas. Así desde que llegué serían las once, hasta las dos, ya me iba a venir aburrido, cuando con el agua prácticamente parada me llegó la pesquera, tampoco para tirar cohetes, dos zapatillas, una de ellas con el kilo y dos sargos buenos. En fin, lo dicho en anteriores entradas, esta pesca requiere...eso...constancia y paciencia, sobre todo esto último.
No hay comentarios:
Publicar un comentario