De nuevo y aprovechando el último día de vacaciones salí para pescar de vaciante, bueno es un decir, ya que como la marea traía sólo 40 º, el agua apenas andaba, todo el tiempo el bote estuvo aproado al viento en vez de a la marea.
En principio iba con la idea de buscar las bailas, pero como llevaba unos cuantos cangrejos decidí probar y con la pleamar que fue sobre las doce y media me llegaron un par de excelentes zapatillas, con más del kilo de peso cada una, luego y como tenía poca carnada, empecé con las bailas, que no estaban muy por la labor, pero que poco a poco fueron dando la caraY para venirme cerca de la bajamar encarné las coñetas que me quedaban y me llegó otra zapatilla, Así que sin proponérmelo saque un buen rancho de pescado, lástima que mañana me reincorporo al curro. Aunque la pesca es así, lo mismo mañana voy superpreparado para las doradas y me vengo con la cara partida....en fin.
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